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Situada en el Mediterráneo, frente a la costa de España, se encuentra la isla de Formentera. Su isla hermana, Ibiza, está a un corto viaje en ferry de 30 minutos hacia el norte, pero a diferencia de su hermana, Formentera no es conocida por su vida nocturna.
Formentera, en cambio, es un refugio tranquilo, lleno de playas vírgenes y aguas turquesas. Sólo accesible por mar, se anima a los visitantes a alquilar bicicletas para explorar sus 82 kilómetros cuadrados. También es el hogar de Marià Castelló, un destacado arquitecto español que llamó la atención de Dayne Lawrie por primera vez con su proyecto artísico “Fragments d’Arquitectura”. Esta revista ofrece una breve mirada a su mundo y su práctica profesional.
Paisaje: El Arquitecto
De la arquitectura de Marià se desprende claramente que al paisaje natural se le da su propio papel en el proceso de diseño. En las casas que incorporan piedra local, lo natural y lo artificial con frecuencia se confunden y combinan. Al mirar sus casas, la inclusión se siente natural, la casa es una extensión de la tierra misma.
La facilidad de esta relación es testimonio de su habilidad y demuestra su enfoque único en el diseño arquitectónico. Es una conciencia del paisaje como arquitecto, que vale la pena escuchar en cada paso y desde el principio.
“Hablamos de proyectar paisaje, arquitectura, diseño interior y diseño de objetos al mismo tiempo, como un todo.”
El territorio no se analiza simplemente como parte de un proceso sino que se considera un protagonista permanente. Hay que considerar su identidad y características. “Hay que estar muy atento”, dice Marià.
Su atención es manifiesta en sus diseños, pero su enfoque de la arquitectura misma parece estar en desacuerdo con la afinidad de sus casas con sus paisajes. Marià explica: “La arquitectura llega después, a menudo más por contraste que por mímesis”.
No se trata de imitar un paisaje sino de crear algo que lo complemente y lo ensalce. Él explica más,
“Se trata de encontrar una harmonía que resuena con diferentes frecuencias”.
Su enfoque del diseño ha demostrado diferenciar su trabajo. Pero darle vida a estos planos en una isla tan pequeña como Formentera entraña otros problemas.
Abastecimiento Insular & Circularidad
Realizar estos diseños en una isla a la que solo se puede acceder en barco proporciona a la práctica de Marià Castelló un conjunto único de desafíos. El enfoque de Marià es tan simple como profundo.
Él mira a aquellos que siempre han practicado la circularidad, haciendo referencia a la “Arquitectura sin arquitectos” de Bernard Rudofsky como “una fuente de sabiduría”. El libro lleva el nombre de su famosa exposición del MoMA de 1964. Polémica y profundamente criticada en su momento, la exposición mostraba imágenes de arquitectura de todo el mundo, incluidos diseños y edificios indígenas. En una época de cambios rápidos, Rudofsky se atrevió a explorar la arquitectura como una experiencia universal que ocurre fuera del modernismo o la educación contemporánea.
En la arquitectura tradicional de Formentera se encuentra información esencial para la arquitectura contemporánea. Parte de ello, comenta Marià, son la circularidad, los materiales de kilómetro cero, la autosuficiencia y las soluciones bioclimáticas pasivas que se dieron de forma natural e inevitable. El resultado de vivir en estrecha conexión con el entorno.
“Creo que es clave saber mirar hacia el pasado sin sentir nostalgia pero tampoco sin caer en la amnesia”.
La obra de Marià abraza los avances arquitectónicos sin olvidar las revelaciones del pasado.
Proteger un Ecosistema Insular
En una entrevista de 2022, Marià tomó nota de su deseo de proteger Formentera de la expansión urbana y de los edificios anodinos y sin alma.
Hoy en día, el enfoque de Marià hacia el diseño consciente ha contribuido al nombre que se ha hecho. Si bien señala humildemente que las intervenciones de su práctica son una pequeña parte de los esfuerzos realizados, reconoce que sus proyectos han ganado un importante reconocimiento e interés por parte del público.
Su esperanza de recibir atención es que genere conciencia y fomente el respeto por su isla.
“Creo que sobre todo se trata de promover una actitud de conciencia, participación y sensibilidad. Que todo el mundo se sienta responsable”.
Su cuidado por los paisajes y ecosistemas locales no sólo determina cómo orienta su arquitectura sino también los materiales utilizados para la construcción.
El enfoque holístico de Marià hace que sus casas sean aún más impresionantes; sin embargo, fue su trabajo de pequeño formato lo que primero llamó la atención de Dayne.
El Proyecto Fragments d’Arquitectura
Fragments d’Arquitectura fue un proyecto realizado “por puro placer” que surgió en 2019 cuando Marià buscaba una forma de jugar con elementos de la arquitectura de forma libre y sin restricciones.
“La arquitectura es una disciplina magnífica, pero que consume una cantidad de tiempo enorme para llevarse a cabo, innumerables ajustes, cambios, compromisos…”
La respuesta a su deseo de libertad y agilidad la encontró en un volumen de 20x20x5 centímetros.
‘Fragments d’Arquitectura’, al igual que sus otros proyectos, desdibuja las fronteras entre disciplinas, pero Marià dice que ‘lo importante es el ejercicio de síntesis para concentrar una gran carga simbólica y espacial en un “momento de pequeñas dimensiones”.’
Ciertas piezas hacen referencia a obras patrimoniales en las que su práctica ha trabajado estrechamente, y cada “momento” contribuye a un todo de mayor trascendencia, con infinitas posibilidades en su disposición. Así, mientras Marià comenta que el proyecto es como un juego, sus “momentos” logran llevar una carga simbólica y poética.
Arquitectura Consciente
Desde las generosas viviendas hasta su práctica artística de mínimos, conocer la obra de Marià Castelló es conocer la tierra de la que procede. Su enfoque holístico, donde el paisaje es inseparable del diseño, permanecerá en nuestra mente. A medida que crece el movimiento hacia una arquitectura consciente de la tierra, esperamos que la circularidad y la sostenibilidad se conviertan una vez más en soluciones naturales.